martes, 27 de noviembre de 2012

La rabia vengadora, por @VanessaBauche.

Por: Vanessa Bauche para Sin embargo. Para los griegos, su nombre significa el que no ve con buen ojo siendo uno de los principales empleos el de servir de guía a la Calumnia. Por tal emotivo la envidia es considerada un pecado capital, porque corrompe la mente y el alma del individuo al punto de degenerar en otros vicios, como la calumnia, la mitomanía, la agresión, por mencionar algunos ejemplos. Bertrand Russell sostenía que la envidia es una de las más potentes causas de infelicidad. 
Siendo universal, es el más desafortunado aspecto de la naturaleza humana, porque aquel que envidia no sólo sucumbe a la infelicidad que le produce su envidia, sino que además alimenta el deseo de producir el mal a otros. Cuanto más débil, insatisfecha o narcisista es una persona, tanto más envidiará a la gente que posea lo que a ella le falta. La envidia sólo se cura viviendo fuera del comparativo, concientizando y resolviendo las propias carencias y facultades, a través de un proceso de crecimiento emocional. La persona madura no envidia a nadie. 

Fuente: José Luis Cano Gil http://www.psicodinamicajlc.com/articulos/jlc/020.html





Este contenido ha sido publicado originalmente por SINEMBARGO.MX en la siguiente dirección: http://www.sinembargo.mx/opinion/27-11-2012/10909.

No hay comentarios:

Publicar un comentario