Desde muy temprana hora del lunes 10 de diciembre, las
calles aledañas a la antigua Casa Alvarado, sede de la Fonoteca Nacional del
Conaculta, se llenaron de amantes de la canción mexicana, quienes no dejaron un
solo asiento vacío en el jardín principal del recinto para disfrutar del
concierto por el cuarto aniversario de “La casa de los sonidos de México”.
Los asistentes, entre quienes se encontraban muchos de los
coleccionistas que han donado sus materiales para enriquecer el amplio acervo
de la Fonoteca y público en general, fueron recibidos con un ponche de cortesía
y la conducción de Jaime Almeida.
En punto de las 20:00 horas, en el escenario montado en el
ala norte del jardín, dio inicio el concierto con la presencia de Armando
Manzanero al piano, quien celebró el cuarto aniversario de la Fonoteca Nacional
y la consolidación de su misión en estos años, como preámbulo para la
interpretación de sus temas: Somos novios, Esperaré y Por debajo de la mesa.
Antes de partir, Manzanero, actual presidente de la Sociedad
de Autores y Compositores de México, recibió en el escenario a Tania Libertad y
al director de la Fonoteca Nacional, Álvaro Hegewisch, para develar una placa
con los nombres de las personas e instituciones que han ingresado su acervo sonoro
a la institución del Conaculta.
Hegewisch agradeció a quienes han ayudado a que este espacio
se haya consolidado en estos años como líder en Iberoamérica, a través de su
programa Ibermemoria, y que su acervo se haya incrementado en un 80 por ciento,
contando a la fecha con más de 420 mil documentos sonoros.
El concierto continuó con el Ensamble Mal’Akh y el cuarteto
de saxofones Anacrúsax, dos ensambles que se han caracterizado por fusionar lo
académico, lo popular y lo experimental, bajo la dirección musical y arreglos
de Felipe Pérez-Santiago.
Aunque la noche no fue programada para el baile, muchos de
los asistentes gozaron y bailaron la versión instrumental de Nereidas, en un
arreglo contemporáneo con guitarras eléctricas y baterías.
En esta noche de tributo a la canción mexicana, del canto
lírico al rock, Encarnación Vázquez
interpretó El triste, de Roberto Cantoral; Adoro, de Armando Manzanero, y, para
sorpresa de los asistentes, Kumbala, tema legendario de La Maldita Vecindad.
La vanguardia del rock se hizo presente con la participación
de Denise Gutiérrez, vocalista del grupo Hello Seahorse, quien subió al
escenario para cantar La barca de oro y Mujeres divinas.
Como invitado sorpresa se presentó el tenor José Luis
Ordoñez, quien interpretó El venadito. Uno de los momentos de gran lucimiento
del cuarteto de saxofones Anacrúsax fue la ejecución del tema Pinotepa, canción
tradicional oaxaqueña que forma parte del repertorio del singular cuarteto.
Por su parte, Roco Pachukote (La Maldita Vecindad-Sonidero
Meztizo) hizo suyo el tema Noche de ronda, de Agustín Lara, con una
interpretación teatral y un mano a mano con la orquesta. La noche continuó con
el dueto que realizó el roquero con Denise Gutiérrez para interpretar El cascabel.
El concierto cerró con la presencia de Tania Libertad, quien
también destacó las virtudes del gran proyecto de la Fonoteca Nacional e
interpretó Cielo rojo y una de las canciones más famosas del cancionero de
Oaxaca, La llorona, que tuvo sus momentos cumbre al fusionar la voz de la
cantante peruana con el theremin.
Un largo aplauso se escuchó por todo el jardín sonoro de la
Fonoteca Nacional del Conaculta, en la que fue una noche dedicada a la bohemia,
a la canción nacional, pero ante todo, a los sonidos de México.
Fuente: http://www.conaculta.gob.mx/sala_prensa_detalle.php?id=24695